Mediante un comunicado oficial, el fabricante francés de neumáticos, Michelin, ha confirmado que la investigación sobre el inconveniente generado por sus neumáticos en el pasado Gran Premio de Estados Unidos, ha concluido.

A continuación la transcripción del comunicado de Michelin, realizado por F1Latam.com:

Los neumáticos no fueron inherentemente defectuosos, pero fueron insuficientemente adaptables a las condiciones extremas encontradas en la curva 13 del Circuito de Indianápolis para este año.

Debido a las evoluciones aerodinámicas de los autos, las normativas que rigen el deporte y la naturaleza de los circuitos, etc., Michelin realiza unas pruebas en el transcurso de cada temporada, con el propósito de desarrollar los neumáticos, los cuales son los más apropiados para cada evento. Los dos elementos claves conocidos sobre el circuito de Indianápolis son:

- La curva 13, con su riguroso óvalo, ya que es la única curva de este tipo en las 19 carreras del campeonato.

- Probar en Indianápolis no es posible.

Por consiguiente, para definir la especificación de sus neumáticos para Indianápolis, Michelin realizó una simulación basada en los resultados de pruebas menos severas de otros circuitos y en valoraciones referentes a las condiciones específicas que probablemente estarían en Indianápolis 2005.

Las investigaciones de Michelin han revelado que las cargas aplicadas en el neumático trasero izquierdo, al pasar en la curva 13 de Indianápolis, eran muy superiores a las valoraciones más altas de los ingenieros de Michelin. Este año, la situación en esta curva se alteró debido a la combinación extrema de velocidad, aceleración lateral y carga dinámica adicional. Los neumáticos Michelin fueron por lo tanto insuficientemente adaptables a las condiciones extremas de la curva 13 en el 2005. Este era el problema.

Por otra parte, las investigaciones referentes a los materiales y a la construcción empleada para producir los neumáticos de Indianápolis, han confirmado la ausencia de cualquier anomalía. Los neumáticos no tenían un defecto intrínseco, sino que fueron insuficientemente adaptables a la curva 13.

Además, este análisis confirmó la relevancia de las soluciones del neumático, especificadas para el resto de circuitos.

En retrospectiva, este análisis valida perfectamente la pertinencia de las medidas preventivas requeridas por Michelin y sus equipos, en el interés de la seguridad del piloto y confirma plenamente que la adición de un chicana a la entrada de la curva 13, que habría garantizado velocidades más bajas al pasar la curva 13, habría permitido a los espectadores no ser privados de una competición de alta categoría, mientras que al mismo tiempo se garantizaba la seguridad de los pilotos.

Por consiguiente:

1. De acuerdo con estas investigaciones, Michelin ha revisado su modelo de simulación para las curvas 'de óvalo' tales como la curva 13 de Indianápolis, en vista de los efectos especiales causados por esta curva.

2. Michelin solicita que sea posible en el futuro realizar tests en Indianápolis, antes de afrontar el Gran Premio.

3. Michelin confirma que estará presente con neumáticos seguros y competitivos, en los Grandes Premios restantes.

En conclusión, Pierre Dupasquier, Director Mundial de Competición de Michelin, declaró: "El problema era que sub-evaluamos las restricciones extremas a las cuales los neumáticos fueron expuestos en la curva 13, en el contexto específico del 2005. Estamos agradecidos con nuestros equipos por trabajar con nosotros hasta el último momento, para encontrar una solución que habría permitido competir en la carrera con total seguridad. Lamentamos que los aficionados no vieran una carrera emocionante. Sin embargo, en cumplimiento de sus principios, Michelin no sacrificó la seguridad por el rendimiento".

- Fin de la transcripción.