El británico Mike Coughlan, uno de los protagonistas del escándalo de espionaje de la escudería McLaren a Ferrari en 2007, ha sido confirmado por el equipo Williams como su nuevo Jefe de Ingeniería, en un intento por mejorar el actual nivel de rendimiento de la escuadra de Woking.
Su carrera en la Fórmula 1 inició en Lotus, donde desempeñó el rol de Jefe de Diseño. Posteriormente trabajó en los equipos Tyrell, Ferrari y Arrows, antes de unirse a McLaren en 2002 como Jefe de Diseño.
Tras la polémica mencionada anteriormente, Coughlan estuvo como Jefe de Ingeniería en el desarrollo del auto Ocelot Light Protected Patrol Vehicle y también estuvo trabajando en el Michael Waltrip Racing, de la serie Nascar.
Sobre esta noticia, Frank Williams, jefe del equipo, expresó: "Mike Coughlan es un buen ingeniero con una gran experiencia en la Fórmula 1 y tanto en la ingeniería civil como en la militar. Dejó la Fórmula 1 en 2007 debido a la conducta, la cual reconoce que fue errónea y de la cual expresa su más profundo arrepentimiento. Sus dos años de sanción de este deporte han terminado hace algún tiempo, y Mike está complacido por poder darse la oportunidad de hacer esto, y estamos muy contentos por tener a uno de los ingenieros más talentosos y competitivos en la F1, ayudándonos a regresar a las primeras posiciones. El primer paso es reconstruir y fortalecer nuestro grupo técnico. Anunciaremos los siguientes pasos a medida que se vayan desarrollando", concluyó Frank Williams.
Entre tanto, Mike Coughlan dijo: "Estoy agradecido con el equipo Williams por darme esta oportunidad. Mi experiencia en 2007 fue un cambio de vida. Desde entonces, me he esforzado para emplear mi destreza de buena forma, en el diseño del Ocelot vehicle, cuyo propósito es transportar soldados de forma segura. También he disfrutado mi tiempo con el equipo Michael Waltrip Racing. Ahora tengo muchos deseos de regresar a un deporte que amo y me integraré a un equipo que he admirado por muchos años. Me dedicaré totalmente para asegurar que volveremos a ser competitivos, respetando los estándares éticos con los cuales Williams siempre ha puesto en práctica", finalizó Coughlan.